La Cátedra de Ciberseguridad Binter ULL resalta la importancia de concienciar a la población en esta materia

La Cátedra de Ciberseguridad Binter Universidad de La Laguna ha celebrado esta semana la primera mesa redonda con participación de las personas que integran su comité asesor, que son reconocidas especialistas de ámbito nacional. El debate fue moderado por la directora de la entidad, la catedrática de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial Pino Caballero Gil, y en él hubo consenso sobre la necesidad de desarrollar acciones de formación y concienciación para que la población sea más consciente de la problemática de la ciberseguridad, en la cual todas las personas pueden aportar algo con, simplemente, atender a unas mínimas recomendaciones.

Este comité asesor de la cátedra está integrado por Héctor Reboso Morales, director de Binter Sistemas; Fidel Santiago, responsable de Políticas Europeas en el Equipo de Tecnología de Ciberseguridad y Desarrollo de Capacidades de la Comisión Europea; Guillermo Fernández López, jefe de la Oficina de Coordinación de Ciberseguridad del Ministerio del Interior; Deepak Daswani, hacker experto en ciberseguridad; Noemí Brito Izquierdo, directora responsable de las Áreas Legales IT & IP en KPMG Abogados; Jaime Álvarez Menéndez, responsable de Seguridad Informática en Binter Sistemas; y Rosa Díaz Moles, directora general del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), que participó telemáticamente.

La mecánica del encuentro consistió en una batería de preguntas formuladas por la moderadora, por lo que hubo una diversidad de asuntos sobre la mesa. Uno fue el estado de la I+D+i en ciberseguridad en España y Europa, sobre la que se concluyó que, si bien la parte de investigación está en un buen estado, hay un bajón importante en lo referido a la innovación y la transferencia de conocimientos al sector productivo.

Pino Caballero, directora de la cátedra.

Sobre la incorporación de medidas de ciberseguridad en las empresas, desde organizaciones como INCIBE se proponen iniciativas que ayudan a desarrollar la industria y el emprendimiento, y el propio gobierno estatal ha lanzado un Kit Digital orientado especialmente a pymes, del cual se valoró que es la primera vez que un programa de ayudas de ámbito tecnológico posee una partida específica para ciberseguridad. También se destacó la existencia de diversas  subvenciones de ámbito comunitario, como el programa Europa Digital, que consolida distintas líneas de financiación para asuntos digitales preexistentes dándoles un marco propio.

Desde el punto de vista de la seguridad, los expertos coincidieron que las amenazas siempre van a existir, pero, en general, las instituciones españolas están bien preparadas. En este sentido, se ha puesto como ejemplo la actual guerra en el este de Europa, que ha propiciado un aumento de ciberataques pero, por ahora, no se han registrado incidentes graves.

Aun así, la pandemia ya puso de relieve la dependencia tecnológica de la población e instituciones, por lo que es necesario que tanto gobiernos como empresas y ciudadanos sean más sensibles ante el problema de la ciberseguridad. La representante de INCIBE, en ese punto, recordó que en la web del organismo existen recomendaciones para todos los colectivos, que en el caso de la ciudadanía pasan por medidas básicas como mantener actualizados los dispositivos, tener contraseñas complejas y diferentes para cada plataforma, y establecer dobles autentificaciones, entre otras.

La idea es prevenir antes de tener que recuperar la información, por lo que una detección temprana de las amenazas va a ser un activo importante. También es necesario que la población tome conciencia del problema: de nada sirve gastar mucho dinero en equipos que si luego el personal que los maneja no es realmente consciente de los riesgos que se corre con tecnologías tan sencillas como el correo electrónico, que es la principal fuente de acceso de los ataques.

Pero, obviamente, no todo puede depender de los usuarios y hay que ser exigente con las compañías desarrolladoras para que sus productos sean seguros, por lo que se puso en valor el papel de las certificaciones que puedan dar garantías de cierta seguridad a sus clientes. Sobre esa cuestión, el representante del Ministerio del Interior explicó que se está trabajando en un esquema de certificación que será de obligado cumplimiento para proveedores de servicios esenciales y que, recientemente, el gobierno ha anunciado el desarrollo de un Plan Nacional de Ciberseguridad.

Otro aspecto que se tocó fue el de la legislación. España está generando normativa y trasponiendo las reglas europeas en su ordenamiento con un gran rigor, y también se consideró como muy sólido el Esquema Nacional de Seguridad, especialmente porque la administración está obligada a su cumplimento. El problema es que en la empresa privada su seguimiento no está siendo tan consistente. Aun así, se destacó como aspecto positivo que, tanto la ciberseguridad como la privacidad, están imbuidas en las normas que se están desarrollando porque se trata de asuntos transversales. También se recordó que la ciberseguridad atañe a derechos como la propiedad industrial e intelectual.

Hubo tiempo para abordar las cuestiones de género, dado que las mujeres están infrarrepresentadas en el sector de la ciberseguridad. Por ello, es importante alentar vocaciones y dar a conocer más el sector, habida cuenta de que se trata de un nicho de empleo de calidad al cual las mujeres deberían poder acceder en igualdad de condiciones. En ese punto, se recordó que en esta materia no solo son necesarias especialistas con formación en titulaciones STEM, sino que también son precisas personas de perfiles no técnicos, como derecho, psicología, sociología, marketing y recursos humanos. En general, se trata de un sector que prefiere “perfiles híbridos”.

<

p class=»text-right»>Source: ull.es

Deja un comentario